Ejercicio físico:
http://www.sanitas.es/sanitas/seguros/es/particulares/biblioteca-de-salud/dieta-alimentacion/deporte-alimentacion/prescripcion-ejercicio-obeso.html
A la hora de prescribir ejercicio físico a un persona
obesa que desea adelgazar es importante que éste tenga un componente aeróbico
como de fuerza. De hecho, uno de los objetivos en el tratamiento de la obesidad
es que la pérdida de peso no se produzca a costa de la masa muscular, por lo
que es tan necesario como importante que el paciente realice ejercicios
de intensidad y durante un tiempo suficiente. En este sentido, el
ejercicio no debe plantearse como algo que ayuda a la dieta, sino como una
parte independiente del tratamiento de la obesidad.
El problema es que las personas obesas tienen una capacidad física muy
disminuida y una escasa tolerancia al esfuerzo, por lo que el riesgo de que
falle la adherencia al tratamiento es muy elevado, incluso si se inician con
ejercicios de baja intensidad. ¿Qué hacer, entonces?
La clave está en cómo realizar la prescripción del ejercicio
físico, especialmente en el inicio del tratamiento. Hay que ir de menos a
más; sí. Pero lograr que el paciente realice ejercicio físico con
la intensidad y duración deseables no es tarea sencilla.
En este sentido, algunos especialistas sugieren la posibilidad de
someterlo a un entrenamiento intermitente, de tal modo que se sucedan periodos
de un minuto de ejercicio y otro de reposo. Es tiempo suficiente para que
alcance el 80% de su frecuencia cardiaca, pero lo más importante es que al cabo
de media hora habrá realizado 15 minutos de ejercicio intenso.
Este tiempo es suficiente para que se desencadene el proceso de cambios
hormonales que se inicia con la inhibición de la insulina para que el organismo
pueda aprovechar la glucosa que necesita para realizar el esfuerzo. Al mismo
tiempo se aumenta la secreción de otras hormonas, entre las que destacan la
adrenalina, la noradrenalina, el cortisol o la tiroxina, que son las encargadas
de obtener el glucógeno del organismo, mejorar la circulación sanguínea e
incentivar el consumo de energía por parte de las células, que se obtiene a
partir de la grasa acumulada.
Una estrategia como la descrita, en la que se realiza un ejercicio
intenso en cortos pero sucesivos periodos de tiempo, permite intensificar la
secreción hormonal y logra que ésta se mantenga durante varias horas, de modo
que se continua movilizando y quemando calorías incluso después de haber
finalizado la práctica de ejercicio.
Por otra parte el diseño de un programa de ejercicio físico para
el tratamiento de la obesidad debe realizarse de manera personalizada
(atendiendo a la capacidad cardiorrespiratoria y muscular de cada
paciente) es esencial realizar un seguimiento estricto de su cumplimiento por
parte del paciente, pues ésta es la clave de que adquiera su máxima
eficacia.
Resumen:
El ejercicio físico y el deporte es muy importante para la
salud ya que esto nos permite obtener una buena salud mental y una buena salud física
y esto lo podemos poner en practica diariamente haciendo diferentes tipos de
ejercicio y deportes esto no es algo difícil , solo depende de nosotros.